THE BIG BROADCAST OF 1938 (1938)

Mitchell Leisen


The Big Broadcast of 1938. Título original: The Big Broadcast of 1938. Año: 1938. Duración: 94 min. País: Estados Unidos. Director: Mitchell Leisen Guión: Russel Crouse, Howard Lindsay, Walter DeLeon, Ken Englund, Francis Martin (Historia: Frederick Hazlitt Brennan) Música: Gordon Jenkins, John Leipold, George Parrish. Fotografía: Harry Fischbeck (B&W). Intérpretes: W.C. Fields, Bob Hope, Martha Raye, Dorothy Lamour, Shirley Ross, Lynne Overman, Ben Blue, Leif Erickson, Patricia Wilder, Grace Bradley, Rufe Davis, Lionel Pape, Virginia Vale, Russell Hicks. Productora: Paramount Pictures. Género: Comedia. Musical
Premios: 1938: Oscar: Mejor canción original

Cuando se rodó esta película el cine sonoro era aún muy joven, ni siquiera llevaba diez años en las carteleras, por lo que era habitual rodar esta especie de revistas musicales por donde figuraban con un argumento simplón las estrellas del momento. Así nos encontramos con Martha Raye, una actriz estrambótica y alocada, cuya carrera no fue demasiado brillante pues se limitó a papeles secundarios, sin embargo gracias a sus actuaciones personales durante la Segunda Guerra Mundial y a la Televisión que entonces estaba por nacer, su estrella aumentó de peso aunque por desgracia sus últimos años fueron tristes a causa de su pésima salud.
La película que nos ocupa cuenta como plataforma de Bob Hope y Dorothy Lamour que en años venideros se convertirían en actores de moda. En la presente ocasión, como aún eran unos desconocidos, se les ve muy poco maleables y sus actuaciones son más graciosas que de costumbre.
Al frente del reparto tenemos a toda una leyenda del cine cómico, a W. C. Fields, cómico de la escuela de los hermanos Marx, aunque jamás alcanzó la popularidad de éstos porque parte de su comicidad es verbal y se pierde en los doblajes. Muchas veces es difícil trasladar un sentido del humor de un país a otro porque el humor está muy arraigado en el alma de una nación, forma parte de su identidad étnica y por ende a veces resulta que en otros lares no se comprenden.
Lo mejor de Fields era toda su ironía, aunque su forma de declamar con la boca torcida como si estuviera en un espectáculo de variedades resulta algo incomprensible para nuestros públicos.
El argumento de la película es puro disparate y su puesta en escena muy artificial. Si hubiera sido una producción española se la habría descalificado como cartón piedra, pero como es una película Made in Hollywood se mira hacia otro lado y se es condescendiente con sus defectos.
Bajo la dirección de Mitchell Leisen, los momentos brillantes alternan con los más desafortunados. Sorprende algunas ligerezas argumentales sin que el Código Hays interviniera. Empieza con una especie de ex esposas de Bob Hope, quienes deben repartirse la pensión alimenticia que éste, marido calificado de zona catastrófica,  les debe pasar y como hay una candidata a una cuarta esposa las otras tres temen que con el divorcio que se prevé sus asignaciones decrezcan por lo que se conjuran para evitar el nuevo romance.
Algún número musical tiene calidad aunque están puestos con calzador en el argumento y su argumento es un puro disparate según gustos de la época. Por eso la película se ve en varios momentos como muy obsoleta o tal vez como un documento de una época. Sus estrellas han realizado cosas mucho mejores pero en fin…

Salvador Sáinz


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