En la crítica de Chico y Rita comentaba la fascinación de sus imágenes. Lo mismo pasa con esa obra anterior de Fernando Trueba aunque en esta ocasión se ve perjudicado por un guión enmarañado. Se ve que Juan Marsé es algo gafe para el mundo del cine.
Nos encontramos el mundo de los maquis en la Barcelona de los años cuarenta, pero también en un viaje a un mundo fantástico, un Shanghai de película hollywoodense con un Antonio Resines emulando a los antihéroes del antiguo cine negro. Si las imágenes fascinan, sin ninguna duda, seguir la trama es algo complicado.
Demasiado enmarañada, pero con todo el resultado no es negativo. Sólo son matices que el redactor de estas líneas subraya..
Dos mundos se oponen, el imaginario del relato idealizado del padre y el presente gris y mediocre en que los protagonistas viven amores contrariados.
EL EMBRUJO DE SHANGHAI. Dirección: Fernando Trueba.. País: España.. Año: 2002. Duración: 120 min.. Interpretación: Aida Folch (Susana), Ariadna Gil (Anita), Fernando Fernán Gómez (Capitán Blay), Eduard Fernández (Forcat), Aida Folch (Susana), Ariadna Gil (Anita), Antonio Resines (Kim), Jorge Sanz (Denis), Rosa María Sardá (Betibú), Fernando Tielve (Dani), Juan José Ballesta (Finito Chacón).. Guión: Fernando Trueba; basado en la novela de Juan Marsé.. Producción: Andrés Vicente Gómez y Cristina Huete.. Música: Antoine Duhamel.. Fotografía: José Luis López Linares.. Montaje: Carmen Frías.. Dirección artística: Salvador Parra.. Vestuario: Lala Huete.