SCARFACE, EL TERROR DEL HAMPA (1932)


SCARFACE, EL TERROR DEL HAMPA. Título original: Scarface. Año 1932. País. Estados Unidos. Directores: Howard Hawks, Richard Rosson.Reparto: Paul Muni (Tony Camonte), Osgood Perkins (Johnny Lovo), Ann Dvorak (Cesca Camonte), Karen Morley (Poppy), Vince Barnett (Angelo), George Raft (Guino Rinaldo), C. Henry Gordon (Ben Guarino), Boris Karloff (Gaffney), Henry Armetta (barbero), Jean Harlow (rubia de Paradise Club), Howard Hawks. Guión: Ben Hecht, basado en la novela de Armitage Trail. Música: Adolph Tandler, Gus Arnheim. Fotografía: Lee Garmes & L. William O'Connell (B&W). Universal Pictures. Duración: 93 minutos. Cine negro. Thriller | Policíaco. Crimen. Mafia

Scarface, cuya traducción literal podría ser “cara cortada”, un apodo del propio Al Capone que se enojó mucho cuando se estrenó la popular película de Howard Hawks que puso de moda el cine de gánster. Cinco años antes, La ley del Hampa dirigida por Josef von Sternberg y protagonizada por George Bancroft, Evelyn Brent, Clive Brook, introdujo ese submundo marginal en las pantallas de todo el mundo y es que desde que se inició el género esos seres siempre han tenido éxito a nivel mundial.
Tal como cuenta la película de Hawks, los periódicos de la época llenaban titulares y páginas gracias a su poder de fascinación a pesar de su crueldad, de su violencia y de su agresividad. Como se comenta también, la mayoría de los hampones son de origen inmigrante, concretamente italiano, una comunidad débil en los Estados Unidos que utilizó la mafia para protegerse del dominio anglosajón en el mentado país.
Existe la anécdota que no sé si es cierta de que el propio Capone se mosqueó entre otras cosas porque George Raft se entretenía en voltear a lo largo del metraje una moneda de escaso valor: ¿Porqué no usabas un dólar de plata? Yo pago generosamente a mis hombres.
El mosqueo estaba causado porque el personaje de Tony Camonte (excelente Paul Muni) estaba inspirado en el propio Capone, un inmigrado italiano que se convirtió en el personaje más popular de Chicago.
En aquel tiempo había varios tipos de gánsteres, uno el aburguesado como podría ser el propio Al Capone que se convertía en un personaje adinerado, propietario de casinos, y sobornador de policías, jueces y políticos, y otro el trotamundos como fueron Bonnie y Clyde cuya popularidad fue debida a que atracaban bancos que en aquel tiempo, en aquella radical crisis económica, desahució centenares de miles de familias en toda la nación por lo que el resentimiento de sus víctimas convirtió en héroes a quienes les estaban desafiando vaciando sus depósitos.
El gánster que nos ocupa no desafía al poder, es una forma de poder dentro de la sociedad. Un ser violento, un criminal sin escrúpulos y un sujeto despreciable trastocado, histérico e irracional convertido en una bestia humana.
Excelente reparto donde brillan George Raft, Boris Karloff y Ann Dvorak como la hermana del cruel hampón marcada por una relación ambigua con éste. Película mítica que en su día fue objeto de escándalo por estar protagonizada no por agentes de la ley sino por criminales extremadamente peligrosos. El estilo de Hawks es directo, contundente y nunca firma planos innecesarios. Es toda una lección de cine.

Salvador Sáinz