Fumihiko Sori


ICHI. Título original: Ichi. Año: 2008. Duración: 120 min. País: Japón. Director: Fumihiko Sori. Guión: Kan Shimosawa. Música: Michael Edwards, Lisa Gerrard. Fotografía: Keiji Hashimoto. Reparto: Haruka Ayase (Ichi), Shido Nakamura (Banki), Takao Osawa, Yôsuke Kubozuka, Riki Takeuchi. Productora: Yoshitaka Hori, Yoshio Irie, Sumio Kiga, Hiroyoshi Koiwai, Toshiaki Nakazawa, Yûji Shimamoto, Yasushi Umemura, Takeshi Yamaoka. Género: Acción | Japón feudal. Samuráis

Ichi es una película subsidiaria de Zatoichi, la larga saga del espadachín ciego que tan buenos réditos ha dado al cine japonés aunque en España sólo conocemos la original versión de Takeshi Kitano con esa delirante secuencia final de claqué japonés.
La actual propuesta de Fumihiko Sori nos hacía temer lo peor, una especie de hija inconfesa del gran espadachín invidente que se ve en algunas secuencias peo que por cuestiones de copyright no se le cita de ningún modo. Pero afortunadamente Sori ha recreado con elegancia y finura el Japón feudal y sus sempiternas guerras de clanes. Una especie de western oriental que nos podría traer el recuerdo de Sergio Leone pero ¡ca! El director italiano fue quien copió a los cineastas japoneses con sus aclamados westerns europeos. Pero es sabido que en las últimas décadas los cineastas de culto que tanto idolatra el indocumentado friquismo son burdas copias de otros cineastas de mayor calado intelectual a los que parecen ignorar. La sombra real de este Eastern es nada más y nada menos que el gran Akira Kurosawa, gran maestro de un cine oriental que es urgente revisar y redescubrir.
Así la gran tradición de un cine lento de tempo pero nunca aburrido, con refinados encuadres, cuidada planificación en donde juega baja primordial cualquier gesto, cualquier mirada nos vuelve a seducir en estas andanzas de una espadachina ciega que, al contrario de su maestro, no es invulnerable, es más humana y tiene no pocas debilidades propias de cualquier ser humano.
Haruka Ayase nos ha seducido. Modelo, cantante, actriz, nació en la tristemente célebre Hiroshima, digo tristemente por la ignominiosa bomba que les lanzaron los bárbaros del Oeste no por la ciudad en sí que es digna de nuestro respeto y admiración.
Ayase es una joven de gran belleza y sensibilidad que compone su complejo personaje con esa extraña mezcla de dulzura y firmeza.
La película es muy bella visualmente, un placer para los sentidos. El guión en cambio es algo predecible, tal vez porque quien ve tantas películas en su vida cinéfila acaba por intuir siempre los acontecimientos que se sucederán lo largo de la proyección.
Ichi es pues una película mejor de lo esperado que se merece le den una oportunidad.

Salvador Sáinz


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