HOTEL TRANSILVANIA (2012)


Hotel Transilvania. Título original: Hotel Transylvania. Año: 2012. País: USA. Dirección: Genndy Tartakovsky. Doblaje español: Santiago Segura (Drácula), Clara Lago (Mavis), Mario Vaquerizo (Frankenstein), Luis Villanueva (Wayne), Joan Pera (El Hombre Invisible), Dani Martinez (Jonathan), Alaska (Eunice), Mónica Pérez (Wanda), Xavier De llorens (Murray). Guion: Peter Baynham y Robert Smigel; basado en un argumento de Dan Hageman, Kevin Hageman y Todd Durham. Producción: Michelle Murdocca. Música: Mark Mothersbaugh. Montaje: Catherine Apple. Diseño de producción: Marcelo Vignali. Distribuidora: Sony Pictures Releasing de España. Estreno en USA: 28 Septiembre 2012. Estreno en España: 26 Octubre 2012. Calificación por edades: Apta para todos los públicos.Duración: 82 min. Género: Animación, comedia, familiar.

El problema de las películas de “monstruos” es que se ha abusado tantos de ellos que han terminado por aburrir, alejados ya del espíritu de las obras originales que las vieron nacer. Ver al monstruo de Frankenstein y al conde Drácula convertidos en meros bufones dan más tristeza que risa.
La película en sí tiene muy poca gracia. Monigotes que no paran de gesticular, un argumento deshilachado y un ritmo inexistente acaba más por aburrir que por divertir. Lejos estamos de la familia Munters o de los Addams que en su día fueron novedosos pero su fórmula nacida hace unos cincuenta años ya está agotada por tanto remake apócrifo.
El hotel Transilvania es una película para los niños que gustan disfrazarse en la Fiesta de Todos los Santos, en los países anglosajones llamada Halloween, pero su argumento tiene poca consistencia. El conde Drácula es doblado por Adam Sandler en su versión original y con esto está todo dicho. Humor casposo a raudales. En España escuchamos la voz de Santiago Segura, en México la de Germán Fabregat. En otros países hispanos no tengo información pertinente.
En cambio los dibujos y la animación no están mal, no son dibujos espectaculares realizados por ordenador evidentemente, pero sí funcionan.
A lo largo de la proyección los personajes no paran de moverse, como en casi todo el cine moderno, es la forma en que se cree se entretiene el público aunque yo creo que se equivocan porque acaban por aturdir y aburren a lo largo de la proyección porque no fijas tu atención en sus incidencias.
Los personajes están muy desdibujados, no tenemos tiempo de conocerles porque la animación sólo se interesa en los aspavientos de sus rostros, pero todos en su conjunto pecan de planicie.
En fin…

Salvador Sáinz