FUEGO EN LA NIEVE (1949)


Fuego en la nieve. Título original: Battleground. Año: 1949. País: Estados Unidos. Director: William A. Wellman. Reparto: Van Johnson, John Hodiak, Ricardo Montalban, George Murphy, Marshall Thompson, Jerome Courtland, Don Taylor, Bruce Cowling, James Whitmore, Douglas Fowley, Leon Ames, Herbert Anderson, Thomas E. Breen, Denise Darcel, Richard Jaeckel. Guión: Robert Pirosh Música: Lennie Hayton. Fotografía: Paul Vogel (B&W). Productora: Metro-Goldwyn-Mayer. Duración: 118 min. Género: Bélico | II Guerra Mundial.. Premios: 1949: 2 Oscars: Mejor historia,mejor fotografía (B&N).

En la película Ed Wood de Tim Burton, el penoso director presenta Glen o Glenda a un distribuidor. Éste al contemplar tan horrorosas imágenes exclama: “Debe de ser una broma de William A Wellman”. William Augustus Wellman (Brookline, Massachussets, 29 de febrero de 1896 – Los Ángeles, 9 de diciembre de 1975), director cinematográfico estadounidense especializado en películas de aventuras.
El comentario antes aludido se refiere a cierta costumbre en Hollywood a rodar películas no comerciales “de cachondeo” con la única intención de tomarle el pelo a la gente. No se habla nunca de ellas, pero Jerry Lewis ha sido uno de los más asiduos bromistas y al parecer Wellman no era manco en estos menesteres.
Fuego en la nieve no es ningún cachondeo, se trata de un título que al colocar el DVD en mi reproductor yo esperaba un espectáculo penoso pero he descubierto una excelente película de tema bélico que nunca suele ser de mis predilectos.
El mérito de Wellman radica en no rodar una película de propaganda en que el enemigo es súper malo y estúpido. Apenas aparecen alemanes y los que salen son astutos, pero nunca realizan acciones deshonrosas, sino que sirven a su país como se les ha ordenado.
Los soldados americanos son personas normales, no héroes. Cumplen órdenes. El argumento de la película no nos los muestran en acciones heroicas extraordinarias sino viviendo una guerra cotidiana. La rutina del frente, el hambre, el frío, las inclemencias del tiempo.
El enfoque es mucho más realista y mucho más sobrio que los espectáculos propagandísticos. La vida en el frente es dura y sacrificada.
La película cuenta la historia de unos don Nadie, de unas personas que jamás pasarán a la historia y de las que nadie se acordará en el futuro. Personas que no tienen importancia para los historiadores, pero sí para sus familiares y allegados.  Es la historia de los soldados anónimos que lucharon en el frente que sólo buscaban sobrevivir y terminar lo antes posible para retornar a sus hogares. Buscando la sencillez Wellman consigue la grandeza de una gran película basada más en los valores humanos que en los halagos a las ideologías del poder estadounidense.

Salvador Sáinz


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