SUPERMAN III (1983)


SUPERMAN III. Título original: Superman III. Año: 1983. País: Estados Unidos. Director: Richard Lester. Reparto: Christopher Reeve (Superman / Clark Kent), Richard Pryor (Gus Gorman), Annette O'Toole (Lana Lang), Robert Vaughn (Ross Webster), Pamela Stephenson (Lorelei), Jackie Cooper (Perry White), Marc McClure (Jimmy Olsen), Annie Ross (Vera), Margot Kidder (Lois Lane), Gavan O'Herlihy (Brad), Nancy Roberts (desempleado Clerk), Graham Stark (ciego), Henry Woolf (Penguin Man), Gordon Rollings (Man In Cap), Peter Wear (ladrón de bancos), Justin Case (Mimo). Guión: David Newman & Leslie Newman (Personajes: Joe Shuster, Jerry Siegel). Música: Ken Thorne & Giorgio Moroder. Fotografía: Bob Paynter. Warner Bros. Pictures. Productores: Alexander e Ilya Salkind. Duración: 125 minutos.

Esta tercera película, dirigida por Richard Lester y producida por Alexander Salkind, contiene un guión más centrado en el humor que en sus dos anteriores entregas.  Un esbozo del guion original, escrito por Ilya Slakind, tenía a Superman enfrentándose a Brainiac y a Mr. Mxyzptlk, además de introducir en la saga a Supergirl. El episodio de la ciudad de Kandor, presa en una botella, prometía mucho pero era una idea demasiado cara para ser llevada al celuloide en aquel momento.
Lester había realizado programas humorísticos en la televisión británica caracterizados por un humor satírico y mordaz. Sus primeras películas le parecieron especializarse en un nuevo modelo de musical y comedia, pero la taquilla en cine no manda: impera.
Así que tuvo que dar un giro a su carera con su adaptación de Los tres mosqueteros. Superman III es distinta a las anteriores entregas dirigidas por Richard Donner, ya que como es sabido Lester completó la segunda pero parte del material ya estaba rodado.
Elimina ciertos aspectos. En primer lugar Clark Kent no es tan torpe y, esta vez, se le ha buscado otra novia. Lana Lang, su amor de juventud en Smallville que había aparecido en la primera entrega bajo las facciones de Diane Sherry.
En la tercera entrega se buscó a una actriz de mayor solvencia y Annette O’Toole se hizo con el papel.  Es lástima que la película n diera buenos dividendos en taquilla porque la serie oficial de Superman acabó aquí ya que el siguiente episodio lo produjo años después la Cannon que lo convirtió en una auténtica piltrafa.
Pero Annette en 2001 triunfó de nuevo en la serie Smallville en el papel de Martha Kent (la madre adoptiva de Superman), mientras que Helen Slater (Supergirl) hizo de Lara El, la madre real, y el propio Reeve aparecía ya demacrado por la enfermedad en un papel especial pero significativo.
La importancia de Lana Lang en los comics de Superman es relevante. Mientras Lois Lane está enamorada del superhéroe, Lana en cambio ama a Clark, su alter ego terráqueo ignorando su dualidad y su procedencia kryptoniana.
Los mejores momentos de esta secuela son en primera lugar las escenas con Lana, las secuencias humorísticas tipo slapstick, como el cachondeo sobre la Torre de Pisa, y el dinamismo y la soltura del realizador Lester. Destacamos la secuencia en que un Superman abatido y enfermo libra descomunal batalla contra su otro yo, Clark Kent.
El resto es más convencional. Unos villanos grotescos como casi todos los de la serie, en la que sobresalen los malvados kryptonianos de la segunda entrega, lo mejor con mucha diferencia, y por el contrario tenemos los Lex Luthor, Selena (Supergirl) y Ross Webster de la presente cinta acompañados por cómplices torpes y absurdos.
Todo gira en esta ocasión al mundo de la informática que en aquel tiempo ya empezaba a despuntar. Una informática preWindows y preApple de la que se da una visión exagerada.
La escena de arranque es tal vez la más divertida. Un presunto retrato de la vida cotidiana de Metrópolis vista de forma cómica.
Este episodio de las aventuras de Superman tiene muchos detractores, pero también defensores que valoran su ingenio y su imaginación.

Salvador Sáinz