LOS PASAJEROS DEL TIEMPO (1979)


LOS PASAJEROS DEL TIEMPO. Título original: Time After Time. Año: 1979. País: Estados Unidos. Director: Nicholas Meyer. Reparto: Malcolm McDowell (H. G. Wells), David Warner (John Leslie Stevenson/Jack the Ripper), Mary Steenburgen (Amy Robbins), Charles Cioffi (Police Lt. Mitchell), Kent Williams (assistant), Patti D'Arbanville (Shirley), Joseph Maher (Adams), Corey Feldman (boy at museum), Andonia Katsaros (Mrs. Turner), Jim Haynie (1st Cop), Wayne Storm (2nd Cop), Shelley Hack (Docent). Guión: Nicholas Meyer (Historia: Karl Alexander, Steve Hayes). Música: Miklos Rozsa. Fotografía: Paul Lohmann. Warner Bros. Pictures / Orion Pictures. Duración: 112 minutos. Ciencia ficción. Fantástico. Thriller. Aventuras | Steampunk. Siglo XIX. Viajes en el tiempo. Asesinos en serie

Los pasajeros del tiempo es un ejemplo de ciencia ficción inteligente basada en un buen argumento, un buen desarrollo de guión y unos intérpretes solventes, Malcolm McDowell y Mary Steenburgen. Sorprendió en su día por la audacia de mezclar la vida del escritor H. G. Wells con una de sus mejores novelas, La máquina del tiempo, llevada al cine en 1960 con el título El tiempo en sus manos, dirigida por George Pal. Pero si ésta tenían unos imaginativos efectos especiales, la película de Nicholas Meyes en cambio tiene su punto débil en este departamento. Sus efectos son actualmente obsoletos y son lo peor de la película.
En aquel tiempo cualquier cinta que se precie no podía estar apoyado por la pirotécnica, como en el cine actual, sino en un sólido argumento que une a Jack el Destripador con el propio escritor, así H. G. Wells viaja a su futuro, nuestro presente o el presente de 1979, en un San Francisco deshumanizado en donde se lleva un buen chasco por no encontrar realizada su utopía socialista.En su lugar nos encontramos ante un capitalismo salvaje, un mundo deshumanizado y cruel.
En cambio, Jack el Destripador (excelente David Warner) se siente como en casa. Sutil ironía e inteligente pirueta argumental de su realizador, un estimable auto de cine ficción a quien le debemos algunos episodios de la versión cinematográfica de Star Trek.
l argumento es muy ingenioso, Wels se queda sorprendido por el futuro y sobretodo por el avance de la mujer a la que se encuentra en un puesto de responsabilidad en un banco, algo impensable en la época victoriana, y más aún cuando es la propia mujer quien le seduce y le lleva al huerto en vez de adoptar el tradicional papel pasivo que lleva soportando desde los principios de los tiempos.
Algunos tópicos salpican la acción, a Wells nadie le cree en sus aseveraciones pero finalmente la aventura se resuelve de forma correcta. Pésimos efectos especiales, pero estupenda película es la conclusión final.

Salvador Sáinz